Cada vez más personas contratan una tarjeta de crédito o una financiación rápida en tiendas como Leroy Merlin, Alcampo, Decathlon o Norauto. Lo que muchos no saben es que, detrás de esas tarjetas, se encuentra Oney Servicios Financieros, una entidad especializada en crédito al consumo.
Esta empresa gestiona productos que a menudo funcionan como tarjetas revolving: permiten aplazar pagos en cómodas cuotas mensuales, pero pueden acabar generando una deuda difícil de amortizar. En este artículo te explicamos quién es Oney, cómo funcionan sus productos, qué riesgos pueden implicar y qué puedes hacer si crees que has pagado de más.
¿Qué es Oney Servicios Financieros?
Oney es una entidad financiera especializada en ofrecer crédito al consumo, sobre todo a través de tarjetas de crédito y préstamos personales vinculados a grandes marcas. Aunque no es un banco, Oney está autorizada como Establecimiento Financiero de Crédito (EFC) y opera bajo la supervisión del Banco de España.
La mayoría de sus productos se contratan directamente en el punto de venta, lo que hace que muchas personas firmen sin saber que están tratando con una entidad externa. Esto ocurre, por ejemplo, al solicitar una tarjeta en Leroy Merlin o al financiar una compra en Alcampo.
Oney ofrece financiación rápida y flexible, pero muchos de sus productos funcionan con intereses elevados o bajo el sistema revolving, lo que puede dar lugar a deudas prolongadas y difíciles de cancelar si no se controlan desde el principio.
ONEY Y LAS TARJETAS REVOLVING: POR QUÉ GENERAN TANTA DEUDA
Una de las razones por las que muchos consumidores terminan con deudas difíciles de asumir es la facilidad con la que se contratan los productos de Oney. Las tarjetas y financiaciones suelen ofrecerse directamente en tiendas como Leroy Merlin, Alcampo o Decathlon, en el mismo momento de la compra. En muchos casos, basta con presentar el DNI y una cuenta bancaria. No se exige un análisis financiero en profundidad ni se informa claramente de todos los costes asociados.
Además, buena parte de estos productos funcionan bajo la modalidad revolving, un sistema que permite pagar en cuotas fijas mensuales —aparentemente bajas—, pero que aplica intereses elevados y puede hacer que la deuda se alargue durante años. Muchos usuarios piensan que están amortizando su crédito, cuando en realidad apenas han reducido el capital prestado.
A esto se suma una falta de información clara y transparente. En muchas ocasiones, el cliente no recibe documentación detallada o no entiende el funcionamiento real del crédito que está contratando. Esta combinación de cuotas pequeñas, intereses altos y poca claridad contractual es lo que lleva a tantas personas a quedarse atrapadas en una deuda constante sin saber cómo salir.
FINANCIACIÓN CON ONEY: CÓMO FUNCIONA Y POR QUÉ PUEDE ACABAR EN DEUDA
Oney también ofrece financiación directa desde su propia página web. Desde allí, cualquier usuario puede solicitar un crédito personal o aplazar compras online, eligiendo el importe y el número de cuotas. Todo el proceso se realiza en pocos pasos y sin necesidad de papeleos.
Sin embargo, las condiciones reales del préstamo no están claramente explicadas antes de contratar. Para conocer el TAE, las comisiones o el sistema de amortización, hay que usar el simulador o acceder al Área Cliente. Esta falta de transparencia inicial impide que el consumidor compare fácilmente con otras opciones del mercado.
Según su propio simulador, los intereses aplicados suelen situarse entre el 11% y el 13% TAE, por encima del tipo medio de mercado en créditos al consumo. Aunque pueda parecer razonable, este nivel de interés ya puede considerarse elevado, y especialmente preocupante si se acompaña de comisiones, seguros asociados o una amortización lenta.
Aparentemente, se trata de una financiación cómoda. Pero en la práctica, el cliente puede terminar pagando mucho más de lo esperado y atrapado en una deuda prolongada. Si es tu caso, recuerda que también puedes reclamar si hubo falta de transparencia o condiciones abusivas.
¿PUEDO RECLAMAR A ONEY?
Sí, puedes reclamar a Oney si contrataste una tarjeta, préstamo o financiación y consideras que las condiciones eran abusivas o poco transparentes. Esto es especialmente relevante si has estado pagando intereses muy altos durante años o si te ofrecieron el producto sin explicarte claramente cómo funcionaba.
Los tribunales españoles han dado la razón a muchos consumidores en casos similares, anulando contratos por dos motivos principales:
- Falta de transparencia en la información ofrecida al cliente.
- TAE desproporcionada o usuraria, muy por encima del tipo medio de mercado.
Además, si en tu contrato aparecen seguros o comisiones que no autorizaste expresamente, eso también puede ser motivo de reclamación. Lo mismo ocurre si las condiciones del crédito no te permitían entender claramente cuánto pagarías al final.
Tanto si se trata de una tarjeta vinculada a una tienda como de una financiación directa desde la web de Oney, tienes derecho a revisar tu contrato y reclamar si se confirma el abuso.
OPINIONES DE CLIENTES
Antes de contratar cualquier producto financiero con Oney, es importante conocer también la experiencia de otros usuarios. Basta con hacer una búsqueda rápida en internet para encontrar numerosas quejas de clientes que denuncian problemas similares: seguros no contratados, comisiones inesperadas, mala atención al cliente o imposibilidad de cancelar la tarjeta.
Estas son algunas opiniones reales que reflejan cómo se sienten muchas personas tras haber contratado una tarjeta o financiación con Oney:
- “Hay que tener cuidado porque sin autorizarles te cobran un seguro que no has contratado. Despues de esto, acabare mis pagos pendientes y romperé su tarjeta. Mala atencion al cliente ademas, tardan en contestar o te cuelgan, y las veces que contestan se pasan la pelota sin solucionar nada. (…).”
- “Tengo con ellos una tarjeta Alcampo, tarjeta que nunca ha tenido ninguna comisión. De repente han metido una cláusula que, si no la usas en un año, te cobran 10 euros por tenerla. Hasta aquí culpa mía por darme de alta y por no leer las nuevas condiciones. Llevo toda la semana intentando dar de baja la tarjeta, por email, por teléfono, a través de reclamaciones a consumo y nada. Es imposible dar de baja esta tarjeta. En la web tampoco hay ninguna opción. Es desesperante intentar dar de baja una cosa y que sea completamente imposible. Nunca más. Por favor que nadie se coja estas tarjetas con esta compañía o lo pasará mal pero mal.”
- “Yo también contraté un préstamo en Leroy Merlin, pagado el préstamo me pasan un recibo de 10,79€ por mes por una supuesta póliza de hospitalización que yo no contraté. Devolví los recibos y me están llamado constantemente para reclamarme el pago, les pido la póliza, pero no me la mandan, lógico ya que no contraté nada. (…).”
Si has financiado con Oney, o tienes alguna de las tarjetas que comercializa a través de cadenas como Leroy Merlin, Alcampo o Decathlon, es muy probable que estés pagando de más sin saberlo.
Cada vez más personas están reclamando y logrando cancelar sus deudas y recuperar el dinero abonado en intereses abusivos. Y tú también puedes hacerlo.
En Abogados Legalsha analizamos tu caso de forma totalmente gratuita. Si detectamos falta de transparencia o condiciones abusivas, defenderemos tus derechos frente a la entidad financiera desde el primer momento.
Solo tienes que rellenar nuestro formulario. Cuanto antes lo hagas, antes podrás liberarte de esa deuda usurera.
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